Aquella hormiguita
Publicado el 8 de enero de 2010
No hace mucho alguien me preguntó con qué imagen de mí misma me reconocería. Yo le dije que soy una pequeña hormiguita escalando una montaña blanca de azúcar que se va deshaciendo a su paso haciéndole caer y resbalar una y otra vez. La negra y minúscula hormiguita, con demasiado esfuerzo llega hasta arriba del todo, casi blanca ya de tantos años, de tanto polvo de azúcar. Hoy, me recuerdo con cinco o seis años, jugando a las carreras de hormigas con mi yayo Juanito y mis hermanos. Cada uno se identificaba con una hormiga del campo y la que llegaba primero a la meta imaginaria hacía ganar la carrera a su dueño. Creo que yo nunca gané y por eso todavía sigo identificada con mi hormiga, hasta que consiga llegar a la meta.
Marta Salvador Vélez es licenciada en periodismo, máster en estudios hispánicos, correctora editorial, conductora de talleres de escritura creativa y novelista. En 2022 ganó el premio Roma Valencia Romántica con su novela titulada
7 comentarios
Ya sabes lo que te estaba contando estos días que he descubierto gracias a la filosofía: La meta no es lo más importante, lo importante es dominar la técnica y disfrutar con los medios, en ese casa, la meta se alcanzará sola y sin esfuerzo.
por carmela el enero 8, 2010 a las 3:46 pm. #
Ya sabes lo que te estaba contando estos días: la meta no es lo importante, lo importante es dominar la técnica y disfrutar de lo que te propones, el resultado será llegar a la meta pese a ti misma.
por carmela el enero 8, 2010 a las 3:49 pm. #
A mi siempre me ha gustado y he pensado que era más un gato. Estar todo el día durmiendo al calor de la mantita. pero ahora que no tengo tiempo de estos menesteres perezosos tendré que buscar un animal más trabajador…
por maría el enero 9, 2010 a las 11:32 pm. #
He sacado esto del blog de un amigo
«El presente nunca puede dar una cosa: sentido. Los caminos de la felcidad y del sentido no son los mismos. Para encontrar la felicidad, un hombre sólo necesita vivir en el instante; sólo necesita vivir para el instante. Pero si quiere sentido -el sentido de sus sueños, de sus secretos, de su vida-, deberá rehabitar el pasado, por oscuro que fuere, y vivir para el futuro, por incierto que sea.»
Jed Rubenfeld
por maría el enero 9, 2010 a las 11:35 pm. #
Cuánta razón tiene tu amigo y Jed Rubenfeld. Lo más difícil es encontrar el sentido, aunque el día a día tampoco es fácil…
por Marta Salvador el enero 11, 2010 a las 12:46 pm. #
Recordar el pasado desencadena la nostalgia. / Pensar en el futuro es soñar. / Sólo el presente es lo real, / pero es tan efímera esta realidad / que se vuelve enseguida nostalgia o sueño.
por José Manuel el enero 12, 2010 a las 9:13 pm. #
A ver si estaís menos nostálgicos todos/ que sólo estaís en la frontera se los cuarenta y hay mucha cancha por delante, esto lo dice una que está en la de los sesenta y cuando me cabreo con la vida, me corto el pelo y ¡A otra cosa mariposa!
por carmela el enero 16, 2010 a las 8:44 pm. #